Javier Fernández lo tendrá difícil para ganar por primera vez la final del ISU Grand Prix, a pesar de patinar en España. El patinador madrileño tiene a su enemigo en casa, en el mismo grupo de entrenamiento que comparten al técnico Brian Orser en Toronto. Se llama Yuzuru Hanyu, es japonés, tiene 24 años, como Javier, y fue campeón olímpico y del mundo en el 2014.
El japonés, ha logradoi el record del mundo en un programa corto con una puntuación de 110,95 puntos (lo nunca visto), Hanyu abordará destacado el programa largo del sábado, por delante de un Javier Fernández que, pese a un par de errores en los saltos iniciales, se ha situado segundo, con 91,52, por delante de dos patinadores emergentes de mucho futuro, el chino de 18 años Boyang Jin(86,95) y el japonés de 17 Shoma Uno (86,47).
La primera jornada de la segunda ocasión en la que Barcelona acoge este prestigioso torneo ha deparado un grandísimo nivel. Fernández, que sucedió a Hanyu en su condición de campeón del mundo, no ha estado perfecto. Ya le sucedió el año pasado, aunque pudo recuperar en el programa largo para acabar con la plata, a añadir al bronce del 2011. Esta noche ha puesto la mano en el suelo en el cuádruple salchow inicial y ha abortado el triple toeloop que seguía al triple lutz. Pero su puntuación está en línea con sus actuaciones de este año. “Estoy contento de mi programa, aunque hay que reconocer que Yuzuru ha estado magnífico. Yo me debo centrar en lo mío, hacer un gran programa largo el sábado y a ver hasta dónde puedo llegar”, ha asegurado el patinador madrileño, que ha arrastrado a unos 5.000 espectadores a la pista instalada por segundo año consecutivo en el Centro de Convenciones del Fòrum. Hanyu ha estado, sencillamente, inabordable. Su récord en el corto era de 106,33 puntos, y lo ha pulverizado. Ahora irá a por su récord total de 322,40