Budapest 22 de abril de 2010.- Nunca antes habían jugado ninguno de nuestros jugadores delante de tanto público. Para ellos, ésta sería una ocasión histórica de sentirse auténticas estrellas de hockey hielo por un día. Algo que debido al deporte que practican en su país, se les niega. Hoy a pesar del resultado, les pedimos, les exigimos que olviden cuanto antes el marcador con que ha concluido el encuentro y que se queden con la extraordinaria experiencia vivida. No creemos que sea día de reproche deportivo alguno, teniendo en cuenta la enjundia del rival. Este grupo reunido en torno a Luciano Basile y el resto de su staff, no se lo merecería.
HUNGRÍA 13 – ESPAÑA 1
(5-0, 3-0 y 5-1)
Al igual que sucediera el primer día ante Italia, Hungría necesitó de un gol en superioridad para batir a Ander Alcaine. Aguantaron bien los nuestros hasta ese violentísimo disparo de slap de Tamas Pozsgai que supuso el 1-0. Habían transcurrido nueve minutos y quince segundos y de acuerdo con el plan previsto, la pista se inundó con osos de peluche que caían llovidos desde las gradas del SportArena. Una obra benéfica era la excusa de semejante tormenta osezna que obligó a detener el partido.
Tras su reanudación y al minuto y quince segundos, Andras Benk tras flagrante stick elevado en la trasera sobre un defensa español subiría el segundo aprovechando el rebote tras excelente parada con guarda izquierda del portero del Barça.
El 3-0 no se hizo esperar y menos de un minuto después, Andraz Horvath en una preciosa puerta atrás sorpendía a la zaga española y obligaba a pedir tiempo muerto a Basile. Casi a continuación, segundo parón en esta ocasión por la rotura de un panel de plexi por parte de Pol González en la trasera del marco de Zoltan Hetelnyi, guardameta magiar. El árbitro envío a los dos conjuntos a los vestuarios ante la tardanza en la reparación. Restaban ocho minutos por jugarse del primero.
La única ocasión clara de España llegaría merced al powerplay, después de ganancia de bully en zona ofensiva y excelente circulación tanto de Palacín como de Betrán en los equipos especiales. Lo que perdonó Pablo Muñoz, fue aprovechado a la contra por Balasz Ladanyi para marcar en inferioridad el 4-0.
La manita la completaría Andras Benk, desvíando un tiro de Tamas Sille, ante el que nada pudo hacer Alcaine. Aún quedaban tres minutos para llegar al primer descanso. Así con 5-0, se llegaría intermedio, un receso que solo tuvo dos minutos con cambio de lado y vuelta a la acción por el parón debido a la rotura del cristal. La diferencia en cuanto a disparos de este primer parcial deja poco lugar a la duda: Hungria 22 – España 4.
Un enganchón penalizado a Dany Parra fue perfectamente jugado por el escuadrón defensivo, defendiendo como jabatos los dos minutos en inferioridad sin novedad en cuanto al luminoso.
Lo que no podía evitarse sería que en la siguiente ocasión que tuvieron los anfitriones en la superioridad, la aprovecharan de nuevo con un gran pase a la espalda de la defensa de Ladanyi para que Horvath anotara el segundo de su cuenta particular (6-0).
La indisciplina volvería a castigar de nuevo a los de Basile. En esta ocasión una rigurosa señalización por agarrón a Biec iba a propiciar el cinco-contra-cuatro consiguiente y el 7-0 local por parte de Palkovics desviando un tiro de Janos Vas. Quedaban más de seis minutos y medio para alcanzar el segundo descanso…, toda una tortura para nuestros chicos.
El 8-0 llegaría tras otra parada inicial de Alcaine que no logró barrer la defensa y que en segunda instancia, sería aprovechado para envíar el rebote hasta el fondo de las mallas por Csaba Kovacs.
Al comienzo del tercero Basile daría entrada a "Choge" Alonso en sustitución de Ander Alcaíne. El jacetano tuvo que intervenir con tres muy buenas paradas para comenzar el último periodo.
España aprovecharía su ocasión en el powerplay con un gran gol de Juan Brabo desde los 20 metros con asistencias de Txetxu Gavilanes y Carlos Quevedo. El gol tuvo su dedicatoria especial hacia uno de los fondos por razones que luego explicaremos.
Los húngaros respondieron de inmediato por partida doble en menos de un minutos. El 9-1 llevaría la firma de Krisztian Palkovics y mientras el 10-1 sería obra de Nikandrosz Galanisz.
Hungría volvería a martillear el marco de Alonso, logrando su un-décimo gol en la superioridad gracias a un preciso pase desde la trasera de Galanisz, para que anotara a placer su segundo Csaba Kovacs. Instantes después los anfitriones alcanzarían la docena por medio de Balazs Ladanyi. Lo peor para España es que aún quedaban siete minutos. Y en ese tiempo caería el 13-1 definitivo, gracias a Istvan Sofron.
España finaliza esta histórica primera participación en División I mañana ante Corea del Sur que hoy se ha impuesto a Holanda por 6 a 3.
No se quiere dejar pasar la oportunidad, desde este departamento de prensa de Hockey Hielo de la FEDH, para unirnos y manifestar nuestro apoyo a la pancarta desplegada por la afición española en uno de los fondos del SportArena de Budapest que rezaba "Brabo Libre Ya", en referencia al fotógrafo Manu Brabo, primo de nuestro internacional Juan Brabo y que se encuentra desaparecido en Bengasi (Libia) junto a otros tres colegas.
SportArena de Budadest (Hungría) – 8.479 Espectadores
Árbitro Principal: Jimmy Bergamelli (Francia) – Auxiliares: Scott Dalgleish (Reino Unido) y Mariusz Smura (Polonia)
ESPAÑA 1
Pedraz, J.Muñoz, Palacín, Paz y Betrán; Quevedo, Barnola, P.Muñoz, Hilario y Brabo; Biec, T.Gavilanes y A.Gavilanes, Vea y Parra; González, Vázquez, Desi Pérez, Ribot-Tona y Hernández. Alcaine ( 29 paradas de 37 disparos) – Alonso (12 paradas de 17 disparos)
HUNGRÍA 13
Vas, Ladanyi, Sofron, Horvath, Tokaji; Kovacs, Sikorcin, Palkovics, Polzsgai, Hegyi; Galanisz, Koger, Vas, Sille, Szelig; Holeczy, Magosi, Bartalis, Benk, Orban. Hetenyi ( 12 paradas de 13 disparos )
Moisés Molina
Dpto. de Prensa de Hockey Hielo / FEDH
